Son
producidas por medio de una
protuberancia localizada en la
ingle o en el abdomen, este tipo de padecimiento no respeta género. Aparecen
cuando hay una debilidad o
agujero en el peritoneo, la
pared
muscular que generalmente mantiene los
órganos abdominales en
su lugar.
Comúnmente
suelen ser inofensivas y sin dolor, pero en algunas ocasiones son muy
dolorosas. Las
hernias no suelen producir síntomas incómodos,
pero cuando se presentas algunas de las molestias abdominales pueden indicarnos
un problema mayor.
Por
lo general, con una simple exploración en su cuerpo puede sentir un
bulto y
así poder detectar la
presencia de una hernia, son fáciles de
diagnosticar y el tratamiento es muy sencillo, aunque también se puede tratar
por medio de una cirugía u operación por incisión mínima invasiva.
Últimamente
este tipo de cirugía de la
hernia inguinal ya es más común en
la niñez y en adultos mayores, mientras que la probabilidad de sufrir una
cirugía
por hernia femoral aumenta a lo largo de la vida.